Desafíos ambientales, creciente necesidad de controlar los costos de energía. Ante estos desafíos, la optimización de las redes de distribución de agua potable se está convirtiendo en un imperativo.
Para lograrlo, están surgiendo soluciones que ofrecen enfoques innovadores para reducir el costo energético del bombeo de agua potable y garantizar la continuidad del servicio. Profundicemos en los detalles de esta revolución tecnológica.

La energía en el centro de los desafíos de las redes de agua potable

El sector del agua se enfrenta a importantes desafíos energéticos. En particular, el bombeo, que representa en promedio más del 90% del consumo eléctrico en una planta de producción de agua potable.

Esta actividad es una de las que más energía consume en el ciclo del agua, después del saneamiento aguas residuales, lo que genera altos costos para los operadores y una importante huella de carbono. Este alto consumo se explica a menudo por el desajuste entre la capacidad de los sistemas de bombeo y la demanda habitual. A falta de una gestión precisa y adaptativa, las estaciones de bombeo suelen sobredimensionarse para poder satisfacer los picos de demanda.

Sin embargo, estas condiciones extremas rara vez ocurren, lo que conduce a un desperdicio de energía durante los períodos de bajo uso. En algunos casos, el dimensionamiento del sistema se basa en estimaciones aproximadas, a falta de datos precisos sobre la demanda real de agua. En un contexto en el que la eficiencia energética y la sostenibilidad se han convertido en prioridades, es esencial repensar estos procesos para reducir la huella energética y optimizar los costos operativos.

¿Y si la clave fuera volver a colocar al usuario en el centro? ¿Para dimensionar mejor el servicio y adaptarlo a la demanda de los usuarios?

¿Cómo reducir el consumo energético del bombeo de agua potable?

Para hacer frente a estos desafíos, se pueden implementar varias estrategias. Entre ellas, el ajuste en tiempo real del funcionamiento de las bombas de la red de agua potable. Para lograr una eficiencia energética óptima, primero es necesario analizar cuidadosamente el funcionamiento del sistema de bombeo específico para cada territorio: la presión, el flujo, los niveles de los embalses y cualquier otro parámetro crítico deben monitorearse y analizarse de forma continua, antes de diagnosticar las opciones de optimización.

Purecontrol ha desarrollado con precisión una solución para analizar la distribución del agua potable y predecir la demanda de agua, durante un máximo de 7 días, mediante inteligencia artificial. Luego, la solución envía comandos de control para ajustar constantemente el bombeo y el almacenamiento de manera que se adapten a la demanda. El servicio está dimensionado y adaptado a la demanda real, lo que permite En fin para reducir el consumo de energía.

‍

‍

Concretamente, la solución Purecontrol modelará la forma de un depósito de agua potable (relación altura/volumen) utilizando únicamente los flujos históricos y las variaciones del nivel del depósito. Este conocimiento del volumen disponible, combinado con una predicción de la demanda de agua, permite conocer en tiempo real la autonomía de los depósitos de agua potable. De este modo, la solución implementa una gestión optimizada de los ciclos de bombeo, al tiempo que garantiza el control del riesgo de interrumpir la continuidad del servicio.

Gracias a la predicción de la demanda de agua y la duración de la batería, la solución planificará automáticamente los ciclos de bombeo para maximizar el funcionamiento durante las horas de menor actividad.

La tecnología desarrollada también permite conocer la eficiencia de las distintas bombas en tiempo real y sin submedición eléctrica, y así identificar los escenarios de bombeo más eficientes. A continuación, se priorizarán automáticamente para minimizar el consumo de energía.

‍

Un enfoque global que permite el logro simultáneo de varios objetivos (energía, costo, impacto del carbono, seguridad del servicio)

La solución también es capaz de simular diferentes escenarios para predecir los impactos de futuros incidentes o picos de consumo. Esto da a los operadores un margen de maniobra para adaptar rápidamente las estrategias de gestión, garantizando así una mayor resiliencia de la infraestructura.

La ventaja de esta solución que utiliza Inteligencia Artificial es que puede tener en cuenta diferentes restricciones y objetivos, y analiza continuamente para ser «autodidacta». Por lo tanto, la priorización de las bombas es automática y, por lo tanto, puede evolucionar automáticamente de acuerdo con el mantenimiento realizado en las bombas.

Este nuevo modo de regulación mediante la IA abre la puerta a un funcionamiento muy dinámico, por ejemplo, en relación con la tarificación de la electricidad por hora, teniendo en cuenta la intensidad de carbono de la electricidad de la red, o para maximizar el autoconsumo de la electricidad solar producida in situ.

‍

‍

Este enfoque global no solo permite reducir significativamente los costos de energía (hasta un 30% en algunos casos), sino también para prolongar la vida útil de los equipos. De hecho, al evitar ciclos excesivos de encendido/apagado, se reduce el mantenimiento de las bombas, lo que se traduce en una reducción de los costos de mantenimiento y una mayor confiabilidad del servicio. Al basarse en el análisis de datos para anticipar las averías de los equipos o detectar anomalías, como las fugas, la solución garantiza la continuidad de los servicios esenciales para las comunidades.

Una solución que ha demostrado su eficacia, especialmente en Agua de Valencia Romans Agglo, que logró reducir su factura energética en 1.500 euros a la semana, consiguiendo una reducción de CO2 de casi un 15%, gracias a la gestión inteligente de los sistemas de bombeo.

‍

Para obtener más información, descubra el testimonio de Eau du Bassin Rennais durante una conferencia en el Carrefour des Gestion de l'Eau: Descubra el testimonio

‍

Purecontrol está revolucionando la gestión de las redes de distribución de agua potable gracias a sus soluciones basadas en inteligencia artificial. Al optimizar los sistemas de bombeo, reducir el consumo de energía y hacer que la infraestructura sea más confiable, permitimos que las comunidades cumplan con los desafíos ambientales y económicos del sector. Nuestras soluciones no solo garantizan ahorros significativos, sino que también contribuyen a una gestión más sostenible y resiliente de los recursos hídricos.

‍

‍